Los secretos de Prince Khalid; el imperio del Juddmonte Farms firme tras su muerte (Por Freddy Chirinos Cané)
Por: Abrahan Carvajal - enero 17, 2021
A comienzos de esta semana se hizo público el fallecimiento de uno de los más grandes impulsores y visionarios del hipismo, el Príncipe Khalid bin Abdullah Al Saud, creador del imperio Juddmonte Farms, una de las operaciones hípicas más representativas e influyentes de la historia del deporte.
“Prince Khalid”, como se le llamaba cariñosamente en el ambiente hípico, se inició como propietario a fines de los años 70 y fue a través de Known Fact, un potrillo americano hijo de In Reality, que ganó su primer “classic” en las 2,000 Guineas de 1980.De ahí en adelante, la chaquetilla de colores verde, blanco y rosado no dejaría de aparecer en la lista de participantes de las carreras de caballos más importantes alrededor del mundo.
Con Rainbow Quest, fue su primer triunfo en Arco del Triunfo, en Longchamps el recinto donde conoció de la hípica siendo un adolescente
Enumerar a los grandes campeones de Juddmonte tomaría mucho tiempo, pero si queremos repasar algunos nombres tenemos que considerar, entre los más importantes, a Rainbow Quest, Dancing Brave, Warning, Quest for Fame, Commander in Chief, Zafonic, Empire Maker, Oasis Dream, Workforce, Dansili, Kingman, Intercontinental, Arrogate, Frankel, Expert Eye y la gran Enable.

Frankel, la perfección equina encarnada en este hijo de Galileo que hilvanó su invicto a 14 salidas (Foto Trevor Jones)
Sin embargo, lo que genera la máxima admiración por Prince Khalid es la forma como logró construir en tan solo 40 años una dinastía superior de caballos de carrera, que no ha tenido éxitos en competencia únicamente, sino que además ha logrado trascender, al mismo nivel o incluso aún más, en la cría.
Pero, ¿Cómo se logra un éxito de semejante envergadura? ¿Con dinero? ¿Con suerte? ¿Con ambas cosas? Cada hípico tienen una opinión al respecto y se respeta, pero el caso de Juddmonte, en mi opinión, va mucho más allá de esas dos variables comúnmente nombradas por muchos.
En primer lugar, poder contar con un gran equipo de profesionales que después de varios años de carrera hoy dirigen la operación y tienen muy clara la visión del haras. Los dos más importantes, indudablemente, son Teddy Grimthorpe (Racing Manager) y Simon Mockridge (Stud Director en Inglaterra).

Hasili, la hija de Kahyasi y Kerala, pilar de su éxito en la crianza, su gallina azul(Foto Juddmonte Farms)
En segundo lugar, ese apasionamiento de Prince Khalid por el pedigree y el profundo conocimiento de las líneas maternas que utilizó como base del haras. Ese enfoque le permitió perfeccionar su selección de madres siempre buscando los mating ideales, lo cual le permitió producir la friolera de 113 ganadores individuales de Grupo 1.
La más icónica de todas las líneas maternas de Juddmonte es, probablemente, la que inició Kerali (familia 11) pero llevó a otro nivel su hija Hasili cuando fue capaz de producir 6 super campeones (en años casi consecutivos) como: Dansili (1996), Banks Hill (1998), Heat Haze (1999), Intercontinental (2000), Cacique (2001) y Champs Elysees (2003).
Esto demuestra la importancia de utilizar data y estadística para reducir “margen de error” en la reproducción, lo cual pone en tela de juicio el antiguo refrán que dice “cría lo mejor con lo mejor y espera lo mejor”.
En tercer lugar, haber podido confiar sus caballos a grandes entrenadores, como Jeremy Tree, Sir Henry Cecil, Bobby Frankel o John Gosden, que más allá de saber cómo llevar el estado físico de un caballo al óptimo, lograron identificar, junto con Prince Khalid, los métodos ideales para entrenar a los individuos que provienen de una misma familia materna, buscando la perfección a lo largo del proceso.
En cuarto lugar, pero no menos importante, la importancia de invertir en la mejor tierra posible y en instalaciones de nivel superlativo, con la finalidad de brindar la máxima comodidad a padrillos, yeguas y, sobretodo, a los productos, quienes se convertirán en futuros atletas de competencia.Sus campos en Lexington Kentucky, Banstead Manor en Newmarket y New Abbey en Irlanda son auténticas obras de arte para la cría de caballos de carrera.
La muerte de Prince Khalid marcará un antes y un después en la historia del deporte y del imperio Juddmonte Farms, sin embargo, para felicidad de todos los que nos gustan las carreras de caballos, hace pocas horas se anunció que la saga continuará dirigida por sus hijos. Desde aquí, deseamos de todo corazón que el éxito perdure para que sigan inspirando a más personas a hacer hípica enfocados en la calidad y en la excelencia.